Con gran alegría y orgullo compartido, todos los trabajadores y trabajadoras judiciales de la provincia de Santa Fe, aportamos nuestro granito de arena para poder seguir levantando a la solidaridad como bandera. Esta vez en Rafaela, con la reinaguración de la Sede volvimos a concretar otro de los acontecimientos que nos unen como una gran familia judicial.

La presencia de los invitados especiales como Juan Enrique Cisneros, Héctor Durunda, Luis Ferrero y María del Luján Pieroni, entre otros, y la de las autoridades judiciales y políticas que nos acompañaron, como los Ministros de la Corte Suprema de Justicia, Rafael Gutierrez, Eduardo Spuler, el subsecretario de Justicia Gabriel Somaglia, el presidente del Colegio de Magistrados y Funcionarios Roberto Dellamónica, el intendente de la ciudad Luis Castellano, el Director de IAPOS Oscar Broggi, los camaristas locales Beatriz Abele y Alejandro Román, el Fiscal Regional Diego Vigo, la Defensora Regional Estrella Moreno, el Secretario General de la CGT local Roberto Oesquer, autoridades del Municipio local y Secretarios Generales de distintos gremios;  y las salutaciones del Gobernador de la Provincia de Santa Fe CPN Omar Perotti, del Procurador General de la Corte Jorge Barraguirre y del Senador del departamento Alcides Calvo, hicieron del acto una jornada muy emotiva y una clara y contundente expresión de las razones que nos hacen ser una gran entidad gremial, ligada a dirigentes que tienen una visión integral del Poder Judicial, donde todas y todos realizan una labor conjunta en defensa de los derechos humanos de las personas en general y de los trabajadores y trabajadoras judiciales en particular.

Los dirigentes y autoridades que hicieron uso de la palabra, como María Elena Martínez, Juan Pablo Langella y Jorge Perlo, nos recordaron la finalidad y utilidad de contar con una sede en Rafaela, su historia, su lucha y la participación de los compañeros y José Maria Chiaffredo -como presidente de la Mutual- nos expuso la importancia que el mutualismo tiene para mejorar la vida diaria de todas las familias judiciales.

Una jornada colmada de afectos y recuerdos, una muestra más de como la unidad del conjunto vence las diferencias y crea lazos permanentes de ayuda mutua, cuando ser coherente y solidario es tan necesario. Por ello, un gracias enorme a todos y todas quienes se afilian y participan ya que con su aporte lo hicieron posible.

A continuación, imágenes de la inolvidable jornada: